El libro presenta la sordoceguera en el contexto de las deficiencias y la gran necesidad de formación profesional de aquellos que se configuran como principales mediadores de la inclusión socioeducativa de las personas sordociegas, es decir, el Guía-Intérprete. El trasfondo que orienta las discusiones en esta obra comprende la diferencia como posicionamiento político y la demarcación de la legitimidad del otro de manera epistemológica y en una perspectiva sociocultural.