El libro tiene la intención de contribuir al análisis de estos fenómenos cada vez más frecuentes, no solo en América sino en el planeta. El mapa de éxodos, exilios e inmigraciones es inmenso y difícil de abarcar en su complejidad. Las cifras más cercanas en torno al número de exiliados, expatriados e integrados chilenos en Costa Rica, oscilan entre las 3.000 personas que ingresaron al país desde 1973 hasta por lo menos finales de esa década y parte de la de 1980, que se combina con un proceso de retorno, o mejor dicho, de desexilio en los últimos años de la década de 1980 y siguientes, aunque el arco cronológico de este texto cubre prácticamente cuatro décadas.